Palabras en mi interior

(Tras la tormenta, siempre… la calma) «Pequeña Volarela. Adónde quieres ir? No ves que vas perdida como una mariposa ciega? Por eso te pusiste ese nombre, Volarela, porque te pareces a las mariposas inquietas, locas, apresuradas por lamer todas las flores? Ay, pequeña Volandera! Que acorralada te he visto, corriendo por la orilla como unSigue leyendo «Palabras en mi interior»