Luces (sensaciones del alma) Prosa poética

Más allá de la niebla que envuelve al mundo existe el gozo.

Lo conocen las ondas del mar atravesando el infinito hasta llegar a mis pies.

El gozo de la flor es mi vestido perfumado bajo el quietísimo cielo.

Trepo, como una hiedra por la vida, enzarzando, apasionada, mi corazón a los árboles, mientras alguien pronuncia mi nombre con voz de agua.

El mundo refulge.

Destella el agua; destella el acentor sobre el agua; destella el cielo que sostiene el piar del acentor entre sus dedos azules… Y de ellos una nube inquieta brota…

Inclino mi frente como el girasol en la noche. Todo es belleza.

Las montañas lloran oro por su cima. Los niños gritan, y como la hierba, escriben su alegría en verde intenso.

Fíjate: cuando vuela la paloma, siguen sus alas en el azul, aunque ella acabe de posarse. Porque existe un abrazo allá, hacia el que vamos.

En la pletórica noche cada estrella es una palabra divina. Giran, crecen, ríen, se aman… Las busco.

Quisiera alimentarme sólo del gozo de los astros.

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Dibujo y texto: Maite Sánchez Romero (Volarela)

Publicado por Maite

Entusiasta de la vida, amante de aprender, hechizada por el arte, inspirada en el misterio, aspirada por Dios...

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